May 06, 2021

Maggie’s Center en Leeds, un entorno de calma natural

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Cada vez son más los centros sanitarios que deciden apostar por espacios que contemplan la naturaleza como elemento imprescindible de su diseño.

May 06, 2021

Ante una situación capaz de cambiar la vida a cualquiera, la escritora y diseñadora Inglesa Maggie Keswick Jencks, fue capaz de aprovechar su experiencia en primera persona con el cáncer, para crear un nuevo tipo de centro que pudiese ayudar a pacientes en su misma situación. Entornos que se alejaran de los fríos espacios de muchos hospitales, que fueran capaces de contribuir de otro modo al bienestar de estas personas. Fue en ese instante, durante la década de los 90 que surgió la que se conoce actualmente como Fundación Maggie’s.

Desde su creación hasta día de hoy, esta organización se encarga de crear espacios de apoyo no solo para pacientes oncológicos, sino también para sus familiares. Entornos en los que poder recibir apoyo psicológico, consejos nutricionales u otras terapias, pero que también se convierten en refugios de calma dónde pasar el tiempo entre tratamientos, o incluso conocer y compartir vivencias con personas en situaciones similares. En cada uno de los 30 centros Maggie’s, los pacientes pueden encontrar dicho apoyo de manera gratuita, ya que todos los centros de la fundación son financiados gracias a aportaciones privadas.

Siguiendo la filosofía de Maggie, quien creía firmemente que el buen diseño podía contribuir a mejorar la sensación de bienestar en las personas, este centro en Leeds, al igual que la mayoría de ellos, utiliza materiales naturales respetuosos con el entorno y el usuario. Pero en este caso, además, el estudio Heatherwick ha ido un paso más allá y ha aplicado varios principios del diseño biofílico en el proyecto de este centro. Un factor clave al tratase de un entorno destinado al cuidado y al bienestar. Y es que varios estudios demuestran que el diseño biofílico puede ayudar reducir el estrés, mejorar las funciones cognitivas, acelerar los procesos de recuperación y curación o incluso fomentar la creatividad.

Justamente por ello cada vez son más los centros sanitarios, y no solo sino también, centros educativos o incluso entornos de trabajo que deciden apostar por espacios que contemplan la naturaleza como elemento imprescindible de su diseño. Centros que como este, apuestan por el uso de materiales naturales y táctiles, que valoran la importancia de la luz natural sin olvidarse de la iluminación artificial, fomentando una iluminación cálida y cambiante según las necesidades de cada espacio y que contribuyen además a la creación de areas verdes.

“El diseño del centro se adapta perfectamente en una parcela con un terreno complejo. Nos encanta que el Estudio Heatherwick haya sido capaz de incorporar tantos espacios verdes en el centro, ya que esta conexión con la naturaleza, así como el buen diseño y arquitectura del espacio pueden tener un gran impacto en el estado de salud, tanto mental como físico de nuestros pacientes. Esperamos que todo aquel que visite el centro pueda disfrutar del cultivo y los jardines diseñados por Balston Agius, y se sienta reconfortado en los espacios del centro.” - Laura Lee, Directora General de Maggie’s.

Con interiores más propios a los de un hogar, que a los de un entorno hospitalario, el centro Maggie’s Leeds, para salvar el desnivel del terreno ha sido diseñado como si de un grupo de grandes macetas se tratara. Construido principalmente en madera, su estructura prefabricada se divide en tres grandes espacios que albergan las distintas salas de asesoramiento y envuelven ‘el corazón’ del edificio, un espacio central dónde se encuentra la cocina, la gran mesa comunal así como otros espacios de carácter más social. Espacios acogedores que se conectan con el jardín y se convierten en un refugio aislado del mundo exterior, que contrastan con la mayoría de centros medicos tradicionales, donde reina lo impersonal, los espacios asépticos y lo estandarizado.

Sus cubiertas ajardinadas, desarrolladas en honor a la pasión por la jardinería de Maggies Keswick, han sido diseñadas por el galardonado paisajista Balston Agius. Y más allá de ser capaces de aislar térmicamente los interiores durante los meses más fríos del año, éstas han sido pensadas para que todo aquel que visite el centro pueda involucrarse y ayudar a cuidar de los más de 23.000 bulbos y 17.000 plantas autóctonas que en ellas se encuentran.

Fotografías Hufton + Crow.